De nuevo un Potter en la época veraniega. Harry Potter, en su quinto año en Hogwarts, se estrenaba en Julio de 2007. De nuevo daba de qué hablar, con el nuevo director, casi desconocido, del que se había hablado mucho en los últimos meses, ya que muchos eran los nombres que se barajaban para hacer esta quinta entrega de Harry Potter, entre ellos, Steven Spielberg o Guillermo del Toro, quien ya habia sonado para El Prisionero de Azkabán. A Yates, la posteridad de los Potterfans le recordará como "El Asesino". Sin duda a los más acérrimos de J.K. Rowling no les hizo mucha gracia el recorte general que le hizo al libro, convirtiéndolo en la película más corta de la saga (hasta la fecha, ya que Las Reliquias de la Muerte Parte 2, la supera con dos minutos menos)
A mí, Yates me pareció correcto y más que aprobado: más bien, sobresaliente. Dirigió la película de Harry Potter sin baches, navegando por los inquietos mares de la mente inexplorada sin meter la mata, y reflejando en expresiones corporales de los actores, o gestos simples, la conexión entre Voldemort y Harry, sin duda, el plato fuerte de la película que colisiona en un climax final, que hasta hoy, y desde mi humilde punto de vista, ninguna película de Harry Potter ha superado todavía. Sin embargo, esta es una de las películas de Potter que menos convencieron a los lectores, aunque en la encuesta que realizó Fotogramas, y que publicó en el número de Julio de 2011 (revista 2.013), es la tercera mejor considerada por los espectadores.
Harry Potter y la Orden del Fénix no batió su propio record, pero superó a todas sus predecesoras excepto a La Piedra Filosofal, convirtiéndose con sus 656 millones de euros de recaudación a nivel mundial en la más taquillera de todas después de Harry Potter y la Piedra Filosofal, hasta ese momento. Tal vez, el motivo de esa incrementación de éxito, fue aquello de lo que las revistas y los medios venían tanto tiempo hablando: el primer beso de Harry Potter. Señoras y señores, Harry ya es mayor.
Con caras nuevas, algunas desconocidas (Evana Lynch fue todo un descubrimiento) otras muy conocidas (destacando a Helena Bonham Carter), y otras que vuelven (Gary Oldman, de nuevo en la piel tatuada de Sirius Black), David Yates se pone a la cabeza de Harry Potter y la Orden del Fénix (David Yates, 2007), donde Harry tiene que afrontar, tal vez, el peor tormento: que todo el mundo le de la espalda. La resistencia ante la represión casi hitleriana de un ministerio intolerante (el universo Potter se mete por primera vez en política), los flashbacks, la Orden del Fénix, y ante todo, la representación del mundo mental y la conexion entre Potter y su antagonista, habrían convertido a Harry Potter y la Orden del Fénix en la mejor de la saga, si no fuera por la exacerbada pedantería de Dolores Umbridge, cuyo personaje, y paradojicamente, fue considerado lo mejor de la película según la crítica. A mi, sin embargo...(Salta para seguir leyendo)
...Dolores Umbridge (muy bien) interpretada por Imelda Staunton, me resultó el desatino de la película. No en su concepto principal de profesora que tras el aspecto modoso de sus peludos gatos y su indumentaria integramente rosa (hasta el té que se bebe es rosa) esconde una maldad propia de una Nazi, sino en el desarrollo cómico de sus escenas.
Creo que hay un pequeño desacuerdo entre la tremenda voracidad de la verdadera naturaleza del comportamiento de esta mujer de métodos medievales para con sus alumnos, y la música cómica que acompaña a sus escenas. Hace que parezca rídiculo. Si bien la intención del director era quitarle crudeza a lo cruento de como una profesora impone su poder político haciendo que críos se automutilen con plumas mágicas que parecen obra de la Santa Inquisición, lo que consiguió, desde mi punto de vista, es ridiculizar el concepto principal de las escenas. Dolores Umbridge enseña los dientes casi desde el primer fotograma, acompañándolo con su voz exageradamente ridícula. De esto, no es responsable la actriz, Imelda Staunton, ya que en la versión original, Umbridge parece más seria, menos cómica, nada ridícula y más bien terrible. A pesar del refinado tono de su voz, no suena estúpida. Olga Cano se ocupó de doblar a Imelda en la versión castellana. Y siento decirla que se cargó el 70% de la esencia del personaje.
Con todo, las escenas de las persecuciones de la Brigada Inquisitorial persiguiendo a los chicos, Filch colgando decretos, son el zapatazo de una producción que con esa y otra salvedad más, es impecable.
Si la banda sonora de las escenas de Umbridge no hubiera sido una pieza tan cómica, si no hubiera escenas de la Brigada Inquisitorial corriendo o Filch señalando granos que le explotan, o si no hubiera habido esa rápida y atropellada escena en la que aparece Grawp, la Orden del Fénix sería la mejor película de la saga. Pero aparece Grawp, en una escena corta, muy corta, que no aporta nada, ni siquiera una situación cómica. Supongo que Yates le puso ahí porqué tenía que ponerlo. Porqué muchos lectores querrían ver al "hermanito" de Hagrid en pantalla, no fuera que se pusieran como los adeptos de Tolkien cuando Peter Jackson guillotinó a Tom Bombadill de la trilogía cinematográfica. Y no pensó en que si lo pones, hay que ponerlo tal como es, o casi, al menos, no resumirlo a cuatro minutos, casi sin base. A mi me habría pasado como con Tom Bombadill, si lo hubieran puesto en La Comunidad del Anillo, la película habría perdido mucho, precisamente, lo que le pasó a esta.
Y bien , ya le hemos sacado todo lo malo a la película, algo que, a pesar de que lo desperfecciona, no estropea todo el buen contenido que hay aquí. Si, muy buen contenido. Por primera vez el protagonista está prácticamente solo, aislado en su propio mundo. Nadie le cree, ya no es el Niño que Vivió, ahora todos le conocen como el Chico que Mintió. Dumbledore no le hace caso, pasa por un tribunal y casi por una expulsión, y cuando llega a Hogwarts, todos le dan la espalda. ¿Resultado? La apatía debilita a Harry y fortalece a Voldemort.
Aquí, aunque los espectadores aún no lo sepan en esta entrega y lo vayamos a ver en la última (y que no lean el texto en rojo si no han leído los libros y no saben el final) se ve por primera vez que Harry, es un Horrocrux, que parte de Voldemort vive en él, y que puede sentirle, incluso ver lo que el ve, notar su ira, su rabia, su maldad, hacer ese movimiento del cuello casi de reptil, demoniaco.
Por primera vez, Harry saca las uñas, y son afiladas. Se ve su maldad, su lado oscuro, su tránsito de ángel a ángel caído, en un limbo en medio de la caída total. Harry tiene un lado oscuro, y aquí, aflora. Por primera vez, Harry Potter, es actor. Así al menos le vieron los críticos. Ya no era Harry Potter, ahora era Daniel Radcliffe, porqué aquí si tenía un buen guión, y un papel con mucho más peso para defender. Harry el líder, Harry el renegado, Harry el atormentado, el influído por fuerzas oscuras, el que tiene un mal dentro que no conoce pero que no puede detener... La crítica por fin lo reconocía: Daniel Radcliffe sabe trabajar. Tal vez tuvo que ver su trabajo en Equus, la cual estrenó en marzo de 2007 en el West End de Londres, lo que hizo que los críticos tuvieran que reconocer que el niño de Harry Potter, sabia actuar.La perversión de Harry es el mayor atractivo del film, junto con las clases de oclumancia, donde se incluye un atractivo flashback sobre el pasado de Severus Snape (en Hogwarts tambien existe el builying, por cierto) que deja muchas ganas de querer saber más.
Cho Chang tiene el honor de ser la primera chica de Potter. El beso de Potter y su chica dio mucho que hablar. Treinta tomas para filmarlo, y mucha expectación, que no le sacó ni un aplauso en la sala de cine el día que la vi. Pero... que gente tan sosa. Le habeis visto crecer, ¿no os alegrais de que ya se haya echado novia?
Katie Leung desbancó a tres mil chicas en la audición del papel de Cho Chang. Viendo esta escena, sabemos porque tantas chicas querían ser Cho.
El gran descubrimiento de esta entrega, es Evana Lynch como Luna Lovegood. Contra 15.000 aspirantes, esta joven irlandesa sin antecedentes cinemtograficos se hizo con el papel, y no nos extraña. Con su mirada ausente, su expresión distraída, y su aspecto de estar siempre en otro planeta, es exactamente la Luna de los libros, convirtiendose en, tal vez, uno de los mejores descubrimientos de toda la franquicia.
También cabe destacar a Helena Bonham Carter en su rol de Bellatrix Lestrange, un papel que parece hecho para ella. Ella nació para ser Bellatrix. Histriónica, estrambótica, completamente loca... nada que no encaje en la esposa de Tim Burton, que también parece hecho a su medida.
Para mi, esta película contiene la mejor escena de toda la Saga. Inicia con la lucha entre Voldemort y Dumbledore, un espectáculo visual de serpientes de fuego, esferas de agua, lluvia de cristales... nada de música, solo los efectos sonoros de los efectos visuales, y mucha emoción
El cénit de la escena, es emocionante. La lucha interior de Harry para luchar contra Voldemort utilizando el amor como arma. El repaso en forma de flashback de momentos de otras películas, la muerte de Cedric, Harry de niño con sus amigos, abrazos, risas... eso si que es magia, y podemos hacerlo todos: tan solo tenemos que amar.
Dicho lo dicho, ya no queda nada más que añadir. Que en esta película no hay Quidditch (por primera vez) que Hagrid sale menos que nunca (y tampoco le eché de menos) que sobran cosas, que faltan algunas, pero que en general, es, y sin duda, la película que contiene mayor peso emocional, pues trata de nuestros propios demonios, y del mal interior que habita en cada uno.
Harry Potter y la Orden del Fénix (David Yates, 2007)
Calificación: *****
Lo mejor: Todo lo de la mente y la conexion entre Harry y Voldemort
Lo peor: Umbridge y Grawp
La Frase: "No se trata de vuestras semejanzas, sino de vuestras diferencias".
"Tu eres el débil, porque nunca sabrás lo que es el amor, o la amistad, y siento lastima por ti".
Un Personaje de siempre: Para mi, siempre será Harry.
Un personaje de los Nuevos: Luna Lovegood
Un Momento: la muerte de Sirius
Una Historia: Lo poquito que sale del pasado de Snape.
Lo que le Sobra: Muchas escenas con aire cómico.
Lo que le falta: Más Oclumancia.
Lo más divertdido: Ron y Hermione ensayando en clase del E.D. ("La he dejado ganar. Por educación")
Lo más conmovedor: La cara de Harry al ver que Sirius ha muerto, y esa escena en la que los gritos de Harry son mudos.
Lo más terrorífico: Voldemort con ese movimiento del cuello en el andén 9 3/4
Para los que piensan que el amor, es el arma más poderosa que existe.